¿Quién no se ha sentido estresado en algún momento? Todos. Y es que el estrés es una reacción natural ante una situación nueva o que implica un reto. Pero, a veces, el estrés se mantiene en el tiempo y esta situación puede afectar a tu bienestar emocional y físico.
Para sobrellevar el estrés y controlar su impacto, dispones de herramientas que ayudan a gestionarlo. Veamos cuáles son.
QUÉ ES EL ESTRÉS
Para poder controlarlo es importante saber primero qué es el estrés. El estrés es una serie de mecanismos, capacidades o herramientas que tiene el organismo para adaptarse a cualquier cambio de manera fisiológica, neuronal o emocional.
Cuando el sistema de respuesta al estrés se mantiene durante un tiempo continuado activado, junto a la elevada exposición al cortisol y otras hormonas del estrés, los procesos del cuerpo se pueden ver alterados. El estrés crónico puede debilitar tu sistema inmunitario. También puede conllevar alteraciones intestinales o acidez estomacal, ansiedad, depresión, pérdida de sueño, así como un aumento de la presión sanguínea, frecuencia cardiaca y grasa en la sangre (colesterol y triglicéridos), entre otros.
¿QUÉ HERRAMIENTAS TENGO PARA GESTIONAR EL ESTRÉS?
No siempre puedes evitar el estrés, pero sí que cuentas con medidas que te ayudan a reducirlo. Para ello, aplica estas sencillas herramientas:
1.- Mejora los biorritmos, clave para un sueño reparador y un buen descanso. Te levantarás con la energía para enfrentarte al día a día de forma activa; mientras que por la noche tu organismo reconocerá que es momento de dormir y recuperarse.
2.- Sigue una nutrición equilibrada. Es importante un buen balance de macro y micronutrientes, ya que dietas mal controladas o hipocalóricas a largo plazo elevan el estrés. Debes tener buenos niveles de ácidos grasos y aminoácidos esenciales, minerales, entre otros, para una correcta formación de hormonas y neurotransmisores.
3- Practica deporte ajustado a tus características. Permite que tu cerebro deje de trabajar y, al liberar endorfinas, noradrenalina y serotonina, relativizar conflictos emocionales. Una buena opción es el yoga, que puede desarrollar mecanismos fisiológicos que combaten el estrés.
4.- Tómate tiempo para hacer actividades relajantes y que disfrutas, y evita enfocar tus pensamientos solo en los problemas.
5.- Fomenta las relaciones saludables en tu entorno y comparte tus preocupaciones con ellos.
Si sientes que no consigues controlar el estrés y que este te sobrepasa, ten presente que también cuentas con ayuda profesional. Y recuerda que siempre tienes una farmacia cerca, consúltales tus dudas y ¡sigue su consejo!